TUS MANOS

Se deshicieron tus manos,
sobre la piel de mi cuerpo.
Dibujando sobre ella,
mil caricias, mil te quieros.

Se resbalaron con calma,
desde mi cuello a mi pecho,
al compás de mis latidos,
que transformaste en intensos.

Se despertaron las ansias,
brotaron los sentimientos.
Se alejaron las distancias,
entre mi cuerpo y tu cuerpo.

Me hiciste sentirme presa,
de el amor más puro y bello,
que pudo sentir mi alma,
sin creer que fuese un sueño.


-Melancolía-

¿Sueño?

Desliza muy suavemente,
tus manos sobre mi cuerpo.
Sin parar, sin detenerte,
pero descubriendo todo.

Recórreme dulcemente,
con suavidad, con decoro.
Y haz que mi cuerpo despierte,
a la pasión de estar loco.

Fúndeme a tu piel ardiente,
y seamos uno sólo.
Mi cuerpo en tu cuerpo yace,
mi pecho, sobre tu pecho.

Hazme el amor con deleite,
con locura y sentimiento.
Que no vuelva a despertarme,
creyendo que ha sido un sueño.

-Melancolía-

AMARTE

Amarte continuamente,
perder la noción del día.
Simplemente alimentarme,
de tu mirada encendida.

Besarte constantemente,
sentir tu boca en la mía.
Respirando de tu aliento,
que es el aire de mi vida.

Fundirme con tus deseos,
despertando mil caricias,
que me recorran el cuerpo,
calmando mis fantasías.

Amarte perpetuamente,
hasta sentirme tan tuya,
que el corazón se me pare,
si no te tengo, mi vida.


-Melancolía-

TE QUIERO

Quiero sentir tu ternura,
enredándose en mi cuerpo.
Bajando hasta mi cintura,
subiendo lento a mi cuello.

Tus labios que me dibujan,
estelas de sentimientos,
recorriéndome completa,
llenándome por entero.

Quiero sentir como peinas,
con tus manos mi cabello.
Mientras me haces tan tuya,
que te convierto en mi dueño.

Mi pecho contra tu pecho,
desnudos latiendo plenos.
Amándonos con locura,
susurrándote un te quiero.

Quiero que no llegue el alba,
si con ello tengo miedo,
de no encontrarme en tus brazos,
de no sentirte de nuevo.


-Melancolía-